Cuaresma

28 de Febrero. Domingo 2º de Cuaresma

«Queremos estar siempre contigo Señor»

Primera lectura

Lectura del libro del Génesis (22,1-2.9-13.15-18):
Él respondió: «Aquí me tienes.»

Salmo

Sal 115,10.15.16-17.18-19

R/.
 Caminaré en presencia del Señor en el país de la vida


Segunda lectura

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (8,31b-34):

Si Dios está con nosotros, ¿quién estará contra nosotros? El que no perdonó a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará todo con él?

Evangelio

Lectura del santo evangelio según san Marcos (9,2-10):

«Seis días después, Jesús tomó a Pedro, Santiago y Juan, y los llevó a ellos solos a un monte elevado. Allí se transfiguró en presencia de ellos. Sus vestiduras se volvieron resplandecientes, tan blancas como nadie en el mundo podría blanquearlas. 4.Y se les aparecieron Elías y Moisés, conversando con Jesús. Pedro dijo a Jesús: «Maestro, ¡qué bien estamos aquí! Hagamos tres carpas, una para ti, otra para Moisés y otra para Elías». Pedro no sabía qué decir, porque estaban llenos de temor. Entonces una nube los cubrió con su sombra, y salió de ella una voz: «Este es mi Hijo muy querido, escúchenlo».De pronto miraron a su alrededor y no vieron a nadie, sino a Jesús solo con ellos. Mientras bajaban del monte, Jesús les prohibió contar lo que habían visto, hasta que el Hijo del hombre resucitara de entre los muertos. Ellos cumplieron esta orden, pero se preguntaban qué significaría «resucitar de entre los muertos».»
                                                                                                                                                  Palabra del Señor

Comentario

Jesús se los llevó con Él… y allí se mostró con toda su luz…

Así como Jesús se los llevó a un lugar apartado a estar con Él, a compartir un tiempo de intimidad con ellos, sus discípulos más cercanos, los que compartían el día a día, así también hoy nos invita a cada uno a un encuentro profundo, privilegiado, íntimo. 

Hoy quiere encontrarse con vos, en la cercanía de la oración, quiere también hoy iluminar tu vida.

Pedro tomando la palabra dijo: “qué bien se está aquí”. Esa experiencia de plenitud, de encuentro profundo con Jesús transfigurado hace crecer en Pedro el deseo de permanecer. También nosotros estamos invitados a vivir ese encuentro, también nosotros estamos invitados a la plenitud, a esa experiencia honda que nos lleva a permanecer.

“Qué bien se está aquí”… como cuando compartimos un rato en familia, como cuando nos encontramos con un amigo que hace tiempo que no vemos, que alegría saber que siempre podemos volver a Él, porque tenemos la certeza que nos espera.

Y esa voz que corre el velo, y les descubre al Hijo Amado, cuánto amor desbordan estas palabras, cuánta generosidad de un Dios que se abaja y nos hace hijos en el Hijo

Jesús los mandó callar hasta la Resurrección, nosotros somos testigos de la Resurrección, nuestra fe es fe en el resucitado, y por esta fe estamos llamados a compartir la experiencia de su amor. 

Para este encuentro los discípulos tuvieron que caminar, subir a la montaña, y allí ser testigos de la luz deslumbrante, también en nuestra vida hay momentos que se nos hacen cuesta arriba, parece difícil seguir andando, pero Él nos llama, nos invita a estar con Él, nos espera y quiere con su luz iluminar nuestra vida.

*Claudina supo de largas caminatas, subidas silenciosas, y encuentros profundos. Pudo ver la bondad de Dios transfigurada en medio de los dolores de su tiempo, y su vida fue testimonio de esta experiencia de amor, que hoy llega hasta nosotros. 

Reflexiones:

Tiempo de Cuaresma, Tiempo de Oración, Tiempo de volver a Dios

*Al leer el texto bíblico, ¿qué queda resonando en vos?

*¿Te das el espacio para disfrutar con Jesús, y experimentar el “qué bien se está aquí”?

Estamos llamados a compartir esta buena nueva, ¿te animas a compartir tu experiencia de Fe?  

AFJM, CARDONA ,URUGUAY

Cuaresma

21 de febrero –Domingo 1° de Cuaresma

«Espíritu de Dios , llévanos al desierto»

Primera Lectura: Génesis 9, 8-15

 Salmo: Salmo 24, 4-5b. 6. 7b-9. «Tus senderos, Señor, son amor y fidelidad».

 Segunda Lectura: 1 Pedro 3, 18-22

EVANGELIO:Marcos 1, 12-15

“El Espíritu llevó a Jesús al desierto, donde fue tentado por Satanás durante cuarenta días. Vivía entre las fieras, y los ángeles le servían.

Después que Juan Bautista fue arrestado, Jesús se dirigió a Galilea. Allí proclamaba la Buena Noticia de Dios, diciendo: «El tiempo se ha cumplido: el Reino de Dios está cerca. Conviértanse y crean en la Buena Noticia».”

PALABRA DEL SEÑOR.

COMENTARIO

En este primer domingo, las lecturas nos invitan a tomarnos en serio este tiempo de conversión y a recordar nuestra profesión de fe. Si queremos tomarnos en serio nuestra vida de bautizados, si queremos prepararnos de verdad para renovar en la Pascua las promesas bautismales, sabemos que no van a faltar en nuestra vida problemas, obstáculos y tentaciones. El mismo Jesús pasó por todo esto. Estamos expuestos a la influencia del mundo que nos rodea, a la tentación de satisfacer nuestros deseos de necesidad, a riesgo de olvidarnos de Dios, quien es el que realmente sacia nuestro vacío.

En esta Cuaresma recién comenzada, tenemos que afrontar el caminar por el desierto (que no siempre es negativo, sino que muchas veces puede ser un espacio de conocimiento personal que nos lleve a la conversión y al cambio), poniendo nuestra confianza y nuestra esperanza en el Señor.

Hoy nuestra profesión de fe es reconocer que Cristo es el Señor de nuestra vida y de nuestra historia, que en Él está nuestra salvación. Pidamos la gracia de poder abrazarnos a Él en este tiempo de lucha, de dificultad, de aislamiento, apoyados en su Palabra, y así iremos preparando, paso a paso, la Pascua, el triunfo de Cristo sobre el pecado y sobre la muerte. No hay victoria si no es en la Cruz de Jesús.

  • Claudina estuvo llena de dificultades, obstáculos y tribulaciones. Pero jamás se apartó del camino que el Espíritu le iba marcando. Atravesó el desierto de la violencia, el terror y la pobreza, y siempre permaneció aferrada a la mano de Jesús.

De ese modo, pudo derramar el amor de Jesús y María a los que la rodearon, dando cobijo y siempre confiando en la Bondad de Dios. Su legado mantiene esta confianza y se esparce por el mundo, anunciando la Buena Noticia.

Reflexionamos: Me tomo un momento para mirar mi interior.

Miro a Claudina, mujer de fe, que se abrazó a Jesús desde la primera noche de su entrega. Su vida

  • ¿Cuáles son las dificultades, obstáculos, tentaciones que están presentes en mi vida hoy? Pido humildemente la ayuda de Jesús para poder superarlos, o caminar con ellos sin perder la fe y la esperanza.
  • El tiempo de desierto, como dijimos anteriormente, es un tiempo de mirar hacia adentro y salir en busca del hermano que puede estar pasando lo mismo que yo. Y, así, caminar juntos hacia la Pascua. Pienso en alguna persona a la cuál me puedo acercar en esta Cuaresma.
  • ¿Qué le quiero pedir hoy a Jesús con relación a lo que estoy viviendo?

No perdamos la visión de esperanza. El oasis en el desierto está y nos devuelve la Vida, como la Cruz, que, al final, nos lleva a la Resurrección.

AFJM, Bella Vista

Adviento

29 de Noviembre. Domingo 1º de Adviento

“ESPERARÉ…esperaré a que crezca el árbol y me de sombra, pero abonaré la espera con mis hojas secas…”

 Isaías 63,16b-17.19b;64,2b-7 Dios sale a nuestro encuentro.

Salmo 79   OH DIOS RESTAURANOS, QUE BRILLE TU ROSTRO Y NOS SALVE 

1Cor. 1,3-9 Aguardamos la manifestación de nuestro señor Jesucristo.

San Marcos 13,33-37

«En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Mirad, vigilad: pues no sabéis cuándo es el momento. Es igual que un hombre que se fue de viaje y dejó su casa, y dio a cada uno de sus criados su tarea, encargando al portero que velara. Velad entonces, pues no sabéis cuándo vendrá el dueño de la casa, si al atardecer, o a medianoche, o al canto del gallo, o al amanecer; no sea que venga inesperadamente y os encuentre dormidos. Lo que os digo a vosotros lo digo a todos: ¡Velad!»»

Palabra del Señor

Comentario

El adviento es tiempo de atención y de cuidado, tiempo de vigilancia dice Jesús en el Evangelio. Tiempo de estar atentos. Atentos a tantas injusticias y desigualdades; atentos a quienes más sufren las consecuencias de esta pandemia; atentos a los grupos, personas e instituciones que están empeñadas en cuidar la tierra y cuidar de los habitantes de la tierra;  atentos a lo que está diciendo el Espíritu en los signos de los tiempos; atentos para descubrir el rostro de Cristo en quién nos necesita; atentos para hablar transmitiendo desde la Esperanza, atentos para saber que somos hijos amados, atentos para cuidar amorosamente a los que nos rodean.


La confianza es la virtud que tiene santa Claudina para los tiempos difíciles, esa confianza hace que tenga más Esperanza que temores, un espíritu que la invitó a estar atenta , una buena cabeza y un buen corazón. Su experiencia Fundante hace que genere sentido a su alrededor, que genere nuevos caminos de Encuentro siempre atenta al soplo del Espíritu.

Pidamos en comunidad, que en este tiempo estemos atentos a la visita de Dios y a su Gracia.

 AFJM, Grupo de oración, Buenos Aires

 

Esperaré

Esperaré a que brote el manantial

y me dé agua.

Pero despejaré mi cauce

de memorias enlodadas.

Esperaré a que apunte

la aurora y me ilumine.

Pero sacudiré mi noche

de postraciones y sudarios.

Esperaré a que llegue

lo que no sé y me sorprenda

Pero vaciaré mi casa de todo lo enquistado.

Y al abonar el árbol,

despejar el cauce,

sacudir la noche

y vaciar la casa,

la tierra y el lamento 

se abrirán a la esperanza.

 

Benjamín González Buelta, sj