Navidad

3 de enero.Santísimo Nombre de Jesús

1 Jn. 2,29-3,6

Sal.97,1.3c-6

 Juan 1,29-34

«Al día siguiente, al ver Juan a Jesús que venía hacia él, exclamó: «Este es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Este es aquel de quien yo dije: «Tras de mí viene un hombre que está por delante de mí, porque existía antes que yo.» Yo no lo conocía, pero he salido a bautizar con agua para que sea manifestado a Israel.»
Y Juan dio testimonio diciendo: «He contemplado el Espíritu que bajaba del cielo como una paloma, y se posó sobre él. Yo no lo conocía, pero el que me envió a bautizar con agua me dijo: «Aquél sobre quien veas bajar el Espíritu y posarse sobre él, ése es el que ha de bautizar con Espíritu Santo.» Y yo lo he visto, y he dado testimonio de que éste es el Hijo de Dios.»

Comentario:

«La familia de Jesús María está de fiesta en este día por tener el nombre de Jesús en su nombre, valga la redundancia.

Hoy la Iglesia celebra el Santísimo Nombre de Jesús. Este Dios tan INNOMBRABLE al hacerse uno de nosotros toma también un nombre. El nombre que el ángel le dio a San José cuando le dijo:”…y le pondrás por nombre Jesús. Se llamará así porque El salvará a su pueblo de sus pecados”. (Mt 1,21)

Pensaba que el nombre de una persona es casi esa persona, sin nuestro nombre NO SOMOS, y me da alegría en el corazón saber y sentir que Dios nos llama por nuestro nombre a la existencia.

Cuando nos llama para una misión, también nos llama por nuestro nombre.

Los niños suelen rezar una oración que dice: Jesusito de mi vida…creo que nuestro nombre va cargado del afecto de quienes nos nombran, de la entonación con que lo pronuncien, para muchos jóvenes o no tan jóvenes la recreación del nombre está impregnada de cariño: ¿quién no se llama Luis y lo rebautizaron Lucho? y así otros tantos. Creo que Dios cuando nos llama dice con tanta ternura nuestro nombre que no hace falta recrearlo, sólo hay que agudizar el  oído  para poder escucharlo.

En el nombre de Jesús obtenemos toda bendición y gracia en el tiempo y la eternidad, pues Cristo dijo: «lo que pidan al Padre se lo dará en mi nombre.» (Juan 16, 23). Por eso la Iglesia concluye todas sus plegarias con las palabras: «Por Jesucristo Nuestro Señor.»

Quiero pedirle a Jesús que su Nombre nunca sea, por nosotros, invocado en vano. Que podamos llamarlo en la desesperanza y en la dicha, en las dificultades y en las penas y que en El encontremos nuestra fuerza, nuestra alegría, nuestra paz, nuestro consuelo.»

Silvina RJM -Año 2014

 

Compartimos una canción hecha por nuestras hermanas de España, que nos ayudará a rezar y profundizar en la fiesta que hoy celebramos. (del CD Porque nos ama… Jesús María. Letra de San Pablo a los Filipenses, música de Lola Edú, rjm)

 

 

Navidad

27 de diciembre.La Sagrada Familia

Lectura del libro del Eclesiástico 3,2-6.12-14

Salmo 127 R/. Dichosos los que temen al Señor y siguen sus caminos

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Colosenses 3,12-21

Como elegidos de Dios, santos y amados, revestíos de compasión entrañable, bondad, humildad, mansedumbre, paciencia.

Lectura del Santo Evangelio según san Lucas 2,22-40

«Cuando llegó el tiempo de la purificación, según la ley de Moisés, los padres de Jesús lo llevaron a Jerusalén, para presentarlo al Señor. (De acuerdo con lo escrito en la ley del Señor: «Todo primogénito varón será consagrado al Señor»), y para entregar la oblación, como dice la ley del Señor: «un par de tórtolas o dos pichones». Vivía entonces en Jerusalén un hombre llamado Simeón, hombre honrado y piadoso, que aguardaba el Consuelo de Israel; y el Espíritu Santo moraba en él. Había recibido un oráculo del Espíritu Santo: que no vería la muerte antes de ver al Mesías del Señor. Impulsado por el Espíritu, fue al templo.
Cuando entraban con el niño Jesús sus padres para cumplir con él lo previsto por la ley, Simeón lo tomó en brazos y bendijo a Dios diciendo: «Ahora, Señor, según tu promesa, puedes dejar a tu siervo irse en paz. Porque mis ojos han visto a tu Salvador, a quien has presentado ante todos los pueblos: luz para alumbrar a las naciones y gloria de tu pueblo Israel.»
Su padre y su madre estaban admirados por lo que se decía del niño. Simeón los bendijo, diciendo a María, su madre: «Mira, éste está puesto para que muchos en Israel caigan y se levanten; será como una bandera discutida: así quedará clara la actitud de muchos corazones. Y a ti, una espada te traspasará el alma.»
Había también una profetisa, Ana, hija de Fanuel, de la tribu de Aser. Era una mujer muy anciana; de jovencita había vivido siete años casada, y luego viuda hasta los ochenta y cuatro; no se apartaba del templo día y noche, sirviendo a Dios con ayunos y oraciones. Acercándose en aquel momento, daba gracias a Dios y hablaba del niño a todos los que aguardaban la liberación de Jerusalén. Y cuando cumplieron todo lo que prescribía la ley del Señor, se volvieron a Galilea, a su ciudad de Nazaret. El niño iba creciendo y robusteciéndose, y se llenaba de sabiduría; y la gracia de Dios lo acompañaba.»

Palabra del Señor

Comentario

«El Evangelio de Lucas de este domingo nos muestra cuatro figuras en torno al Niño, que por primera vez llega al Templo de Jerusalén. María y José cumplen las prescripciones legales con el don de los pobres, los dos pichones de paloma. Quien es así  “rescatado” es el primogénito del joven matrimonio, pero es el Unigénito del Padre, que siendo grande y rico se hizo pequeño y pobre, se hizo uno de nosotros porque, decía el Papa Francisco, “Dios se complace en nuestra pequeñez”.

En Simeón se manifiesta la esperanza de Israel, “pueblo que caminaba en tinieblas ha visto una gran luz”, en él hay un anticipo de Pentecostés, está lleno del Espíritu Santo y por eso puede reconocer al Mesías que ha llegado, “la gracia de Dios que se ha manifestado”. Por eso ya puede partir en paz, sus ojos han visto la salvación, a Cristo, “la luz de las gentes” (“Lumen Gentium” son justamente las dos palabras iniciales del más importante texto del Vaticano II). En cada rezo de Completas la Iglesia repite sus palabras, que anticipan la de cada uno de nosotros cuando llegue el tiempo de partir de la mano de Jesús, María y José.

Es el Espíritu el que permite a Simeón hacer la primera profecía de la Pasión: anuncia el dolor de María, la espada que atravesará el corazón de la Madre “junto a la cruz”. Ana, con sus ochenta y cuatro años, desborda de alegría, seguramente escuchó a Simeón y salió a compartir, a anunciar, la gran noticia. Ni José ni María dicen palabra alguna pero están admirados de lo que decían de su niño. Como ellos, no perdamos la capacidad de admirarnos de las maravillas de Dios cada día, en cada misa, en cada misión, en la vida de familia y del trabajo, en la pobreza o en la enfermedad, ante la naturaleza, ante cada ser humano, ante cada caricia de Dios. Como Simeón, sepamos esperar, discernir, responder al Espíritu Santo para proclamar al Salvador, como Ana salgamos con alegría a comunicarlo y transmitirlo entre la gente que, como entonces, llega apurada y cansada, desilusionada quizás. Simeón y Ana tendrían que estar en nuestras propios templos y comunidades donde a menudo no somos capaces de salir a encuentro, reconocer y acoger.

En esta fiesta en pleno Tiempo de Navidad, como familias y como comunidades religiosas, vayamos a Nazaret, el hogar de José, María y Jesús. El Beato Pablo VI decía en su viaje de 1964, “Nazaret es la escuela de iniciación para comprender la vida de Jesús. La escuela del Evangelio. Aquí se aprende observar, a escuchar, a meditar, a penetrar en el sentido, tan profundo y misterioso, de aquella simplísima, humildísima, bellísima  manifestación del Hijo de Dios…Oh, y cómo querríamos ser otra vez niños y volver a esta humilde, sublime escuela de Nazaret!”. En la casa de José, el Carpintero, seamos niños con el Niño, crezcamos con él, y como María, guardemos en el corazón tantas enseñanzas, que desborden en el anuncio del amor de Dios-con-nosotros.»

Reflexión realizada por Norberto Padilla para  este blog ,el  28 de diciembre de 2014.

Claudina en su infancia conoció al Dios Padre bueno, Dios en lo cotidiano,  miraba el mundo con el corazón de Jesús. En su adolescencia, con el corazón roto, queriendo perdonar y no poder ADORA Y CONFIA. Pasaría ratos contemplando a María, la Madre y a Jesús , el amigo, con sus corazones traspasados por amor, además de consolarle, le cambiarían la mirada poco a poco… Hay que enseñarles, hay que educarles, darles amor, para que los niños puedan crecer en sabiduría y en gracia.

¿Cómo educamos y para qué?

 

 

 

Equipo, AFJM AU

María

15 de Agosto Asunción de la Virgen María

“Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios, mi Salvador”

Primera lectura

Lectura del libro del Apocalipsis (11,19a;12,1.3-6a.10ab):
“Una mujer vestida de sol, la luna por pedestal, coronada con doce estrellas.”
Salmo

Sal 44,10bc.11-12ab.16

R/.
 De pie a tu derecha está la reina, enjoyada con oro de Ofir

Segunda lectura

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios (15,20-27a):
. Si por un hombre vino la muerte, por un hombre ha venido la resurrección.

Evangelio

Lectura del santo evangelio según san Lucas (1,39-56):

En aquellos días, María se puso en camino y fue aprisa a la montaña, a un pueblo de Judá; entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel. En cuanto Isabel oyó el saludo de María, saltó la criatura en su vientre.
Se llenó Isabel del Espíritu Santo y dijo a voz en grito: «¡Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre! ¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor? En cuanto tu saludo llegó a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. Dichosa tú, que has creído, porque lo que te ha dicho el Señor se cumplirá.»
María dijo: «Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador; porque ha mirado la humillación de su esclava. Desde ahora me felicitarán todas las generaciones, porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí: su nombre es santo, y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación. Él hace proezas con su brazo: dispersa a los soberbios de corazón, derriba del trono a los poderosos y enaltece a los humildes, a los hambrientos los colma de bienes y a los ricos los despide vacíos. Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia –como lo había prometido a nuestros padres– en favor de Abrahán y su descendencia por siempre.»
María se quedó con Isabel unos tres meses y después volvió a su casa.

Palabra del Señor

COMENTARIO

EXTRAÍDO DEL»EVANGELIO DE MARÍA” Carlo María Martini

«María  se puso en camino”: las palabras son simples, pero la decisión de partir no fue ciertamente fácil. Era peligroso ponerse en camino en aquellos tiempos, en particular una mujer sola y desposada, ligada a un hombre. Lo que contemplamos es un gesto de LIBERTAD. Toma una decisión a la que se oponían numerosas razones.
 «Se fue de prisa a la montaña”, la gracia del Espíritu Santo no admite demoras. Intuimos que es el Espíritu quien mueve a María y le da tal libertad, tal creatividad para salirse de lo habitual.

Entrando un poco más en el corazón de María, mas allá de la acción del Espíritu Santo que le infunde desenvoltura , libertad , creatividad, podemos percibir también su deseo de ver el signo que le confirmara su misterio.

El anuncio del ángel constituía un secreto muy pesado de vivir, un secreto difícil de comunicar, y da la impresión que no lo había contado a nadie. De ahí su necesidad de contrastarlo y de encontrar la confirmación de la indicación temporal, siguiendo la estela de la voluntad de Dios.

Evidentemente, en María estaba presente el deseo de servicio, de ayudar a  su anciana prima. Ya comienzan a surgir los motivos de una relación humana verdadera y profunda, y son motivos de reciprocidad. Ella quiere dar ayuda y a la vez recibirla.

María puede ofrecer ayuda porque comprende lo que ha acontecido a Isabel, sabe interpretarlo como un acontecimiento divino. María también espera ser comprendida. Es una relación autentica , se comprende al otro y se es comprendido a fondo. De esta reciprocidad en la relación es que a mi parecer, brotara el Magníficat. Así María suscita , o mejor , hace estallar la alegría de su prima, es verdaderamente un encuentro de almas”. ” Carlo María Martini

Ningún plan de Dios se sostiene en soledad: María e Isabel, Claudina y sus amigas… “Se camina con más entusiasmo y más seguridad cuando varias personas van juntas ..” decía Santa Claudina. Todos nos necesitamos para concretar los planes que Dios tiene para nosotros. En el Magníficat María expresa su gratitud y su alabanza. Expresa la alegría de ella y el mundo: Todas las naciones me llamarán feliz.

Hoy estamos llamados a mirarnos a los ojos y a sentir que  al ser María nuestra Madre , nuestro corazón se llena de hermanos para caminar .Ella nos congrega y nos reúne en un mismo hogar, su Corazón , que es el Corazón de Dios.

Equipo AFJM AU

Pascua, Sin categoría

10 de mayo. V domingo de Pascua

 

Hechos de los apóstoles 6,1-7

Sal 32,1-2.4-5.18-19 R/. Que tu misericordia, Señor, venga sobre nosotros, como lo esperamos de ti

1  Pedro 2,4-9

San Juan 14, 1-12

«Jesús les dijo: No se inquieten. Crean en Dios y crean también en mí. En la Casa de mi Padre hay muchas habitaciones; si no fuera así, se lo habría dicho a ustedes. Yo voy a prepararles un lugar. Y cuando haya ido y les haya preparado un lugar, volveré otra vez para llevarlos conmigo, a fin de que donde yo esté, estén también ustedes. Ya conocen el camino del lugar adonde voy.
Tomás le dijo: Señor, no sabemos adónde vas. ¿Cómo vamos a conocer el camino?
Jesús le respondió: Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Nadie va al Padre, sino por mí. Si ustedes me conocen, conocerán también a mi Padre. Ya desde ahora lo conocen y lo han visto.
Felipe le dijo: Señor, muéstranos al Padre y eso nos basta.
Jesús le respondió: Felipe, hace tanto tiempo que estoy con ustedes, ¿y todavía no me conocen? El que me ha visto, ha visto al Padre. ¿Como dices: Muéstranos al Padre? ¿No crees que yo estoy en el Padre y que el Padre está en mí? Las palabras que digo no son mías: el Padre que habita en mí es el que hace las obras. Créanme: yo estoy en el Padre y el Padre está en mí. Créanlo, al menos, por las obras. Les aseguro que el que cree en mí hará también las obras que yo hago, y aún mayores, porque yo me voy al Padre.»

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«Jesús se reconoce a sí mismo como el Camino que acompaña nuestro caminar. Él es la Verdad y la Vida, Él es nuestra esperanza. Sigamos el ejemplo de Claudina que, con un corazón dócil a la acción del Espíritu Santo, reconoció la bondad de Dios y se dejó inspirar por Él para «formar almas para el cielo». Que la más grande misión de nuestra vida sea la de ser instrumentos de Dios para acercar más corazones a los corazones de Jesús y de María. Dios nos bendiga y nos cuide.»

 

En el siguiente enlace encontrarás una propuesta para rezar, meditar, celebrar y compartir juntos la Palabra de Dios del día de hoy. Un proyecto de la AFJM Arg. Uru. que nos invita  a“favorecer espacios para la experiencia y encuentro con Dios “ Preferencias JM

 

3 Espíritu Santo Ven -mayo 10 Camino, Verdad y Vida

Pascua

3 de mayo. IV domingo de Pascua. Buen Pastor

Hechos de los apóstoles 2,14a.36-41
Sal 22,1-3a.3b-4.5 /. El Señor es mi pastor, nada me falta
1 Pedro 2,20-25
Juan 10,1-10
«En aquel tiempo, dijo Jesús:
«En verdad, en verdad os digo: el que no entra por la puerta en el aprisco de las ovejas, sino que salta por otra parte, ese es ladrón y bandido; pero el que entra por la puerta es pastor de las ovejas. A este le abre el guarda y las ovejas atienden a su voz, y él va llamando por el nombre a sus ovejas y las saca fuera. Cuando ha sacado todas las suyas camina delante de ellas, y las ovejas lo siguen, porque conocen su voz; a un extraño no lo seguirán, sino que huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños».
Jesús les puso esta comparación, pero ellos no entendieron de qué les hablaba. Por eso añadió Jesús:
«En verdad, en verdad os digo: yo soy la puerta de las ovejas. Todos los que han venido antes de mí son ladrones y bandidos; pero las ovejas no los escucharon.
Yo soy la puerta: quien entre por mí se salvará y podrá entrar y salir, y encontrará pastos.
El ladrón no entra sino para robar y matar y hacer estragos; yo he venido para que tengan vida y la tengan abundante».

Palabra del Señor

«El Papa Francisco nos dice que «»Cristo Pastor es un guía pensativo que participa en la vida de su rebaño, no busca otro interés, no tiene otra ambición que la de guiar, alimentar y proteger a sus ovejas. Y todo esto al precio más alto, el del sacrificio de la propia vida»

 

 

«Claudina tuvo la experiencia de ser cuidada, amada y buscada por el Buen Pastor, el Dios de la bondad. Su vida fue eco de esta experiencia. Hoy después de doscientos años, la Comunidad de Jesús María sigue siendo el testimonio de esta experiencia transformadora.»

 

 

 

 

En el siguiente enlace encontrarás una propuesta para rezar, meditar, celebrar y compartir juntos la Palabra de Dios cada domingo en casa. Un proyecto de la AFJM Arg. Uru. que nos invita  a“favorecer espacios para la experiencia y encuentro con Dios “ Preferencias JM

 

1 Espíritu Santo Ven – mayo 03 Pastor bueno

 

 

 

Tiempo ordinario

9 de agosto.Domingo 19º del Tiempo Ordinario – Ciclo B

 

1 Reyes 19,4-8/

Sal 33,2-3.4-5.6-7.8-9/. Gustad y ved qué bueno es el Señor

Efesios 4,30–5,2/

Jn 6, 41-51/

Los judíos murmuraban de él, porque había dicho: «Yo soy el pan bajado del cielo». Y decían: «¿Acaso este no es Jesús, el hijo de José? Nosotros conocemos a su padre y a su madre. ¿Cómo puede decir ahora: «Yo he bajado del cielo»?  Jesús tomó la palabra y les dijo: «No murmuren entre ustedes.

 Nadie puede venir a mí, si no lo atrae el Padre que me envió; y yo lo resucitaré en el último día. Está escrito en el libro de los Profetas: «Todos serán instruidos por Dios». Todo el que oyó al Padre y recibe su enseñanza, viene a mí.  Nadie ha visto nunca al Padre, sino el que viene de Dios: sólo él ha visto al Padre.  Les aseguro que el que cree, tiene Vida eterna.  Yo soy el pan de Vida.  Sus padres, en el desierto, comieron el maná y murieron.

Pero este es el pan que desciende del cielo, para que aquel que lo coma no muera.  Yo soy el pan vivo bajado del cielo. El que coma de este pan vivirá eternamente, y el pan que yo daré es mi carne para la Vida del mundo».

Comentario

¿Confiamos que el Señor es el Pan de Vida bajado del cielo? ¿Adonde encontramos ese Pan de Vida? Sin duda es en la Eucaristía. ¿Cómo está nuestro vínculo con el Señor en la Eucaristía? El Señor nos espera en el altar para darnos de su cuerpo y de su sangre que revitaliza y alimenta nuestra fe para vivir cada uno de nuestros días, en los ambientes que nos movemos, (familia, trabajo , etc) Sin ese alimento se nos dificultará la fe ¿Qué conciencia tenemos de esto?

Karina Vera,Comunidad educativa JM de Florencio Varela

YO SOY EL PAN DE VIDA:      EL QUE VIENE A MÍ NO TENDRA HAMBRE;EL QUE VIENE A MI NO TENDRA SED.NADIE VIENE A MI, SI EL PADRE NO LO LLAMA. YO LO RESUCITARE,YO LO RESUCITARE.YO LO RESUCITARE EN EL DIA FINAAAL.  EL PAN QUE YO LES DARE,ES MI CUERPO VIDA DEL MUNDO.EL QUE COMA DE MI CARNE,TENDRA VIDA ETERNA. YO LO RESUCITARE….

imagen1 9 agosto

 

 

 

 

Tiempo ordinario

20 de Junio, Sábado de la 11ª semana del Tiempo Ordinario

Segunda carta de Pablo a los Corintios 12,1-10 /

Sal 33,8-9.10-11.12-13/. Gustad y ved qué bueno es el Señor/

Mateo 6,24-34/

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Nadie puede estar al servicio de dos amos. Porque despreciará a uno y querrá al otro; o, al contrario, se dedicará al primero y no hará caso del segundo. No podéis servir a Dios y al dinero. Por eso les digo: No estén agobiados por la vida, pensando qué van a comer o beber, ni por el cuerpo, pensando con qué se van a vestir. ¿No vale más la vida que el alimento, y el cuerpo que el vestido? Miren a los pájaros: ni siembran, ni siegan, ni almacenan y, sin embargo, el Padre del cielo los alimenta. ¿No valen ustedes más que ellos? ¿Quién de ustedes, a fuerza de agobiarse, podrá añadir una hora al tiempo de su vida? ¿Por qué se agobian por el vestido? Fijense cómo crecen los lirios del campo: ni trabajan ni hilan. Y les digo que ni Salomón, en todo su fasto, estaba vestido como uno de ellos. Pues, si a la hierba, que hoy está en el campo y mañana se quema en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más por ustedes, gente de poca fe? No anden agobiados, pensando qué van a comer, o qué van a beber, o con qué se van a vestir. Los gentiles se afanan por esas cosas. Ya sabe el Padre del cielo que tienen necesidad de todo eso. Sobre todo busquen el reino de Dios y su justicia; lo demás se les dará por añadidura. Por tanto, no se agobien por el mañana, porque el mañana traerá su propio agobio. A cada día le bastan sus disgustos.»

Comentario

 Este Evangelio nos enseña a jugarnos por lo que creemos. A vivir con protagonismo y apostando por nuestras convicciones. También, gracias a Jesús, descubrimos lo valiosos que somos a los ojos de Dios que es nuestro Padre. Cuando nos hacemos concientes de ésto, aprendemos a amarnos a nosotros mismos. Desde la experiencia de descubrirnos amados por Dios dejamos de preocuparnos por aquellas cosas que van y vienen, de lo que tenemos o no tenemos y comenzamos a cuidar lo verdaderamente importante: Tener una vida más fraterna y que nos humanice a todos. La fe es confiar: en nosotros mismos y en lo que Dios puede hacer en cada uno, Jesús confía en nosotros, esa es nuestra garantía. Esto no significa que la vida será color de rosa, sino que no caminaremos solos, vamos con el Señor ¡y eso genera en nosotros posibilidades insospechadas!
Jesús, enseñanos a confiar más en vos y a creer que confiás en nosotros, en lo que podemos cuando estamos junto a vos…
Alumnos y alumnas de 4º año Naturales y Sociales, colegio Jesús María Pablo Nogués
CANCIÓN: LO BUENO QUE HAY EN VOS, EDUARDO MEANA
Pascua, Sin categoría

30 de marzo. Lunes Santo

Isaías 42,1-7/

Sal 26,1.2.3.13-14

R/. El Señor es mi luz y mi salvación

Juan 12,1-11

Seis días antes de la Pascua, fue Jesús a Betania, donde vivía Lázaro, a quien había resucitado de entre los muertos. Allí le ofrecieron una cena; Marta servía, y Lázaro era uno de los que estaban con él a la mesa. María tomó una libra de perfume de nardo, auténtico y costoso, le ungió a Jesús los pies y se los enjugó con su cabellera. Y la casa se llenó de la fragancia del perfume.
Judas Iscariote, uno de sus discípulos, el que lo iba a entregar, dice: «¿Por qué no se ha vendido este perfume por trescientos denarios para dárselos a los pobres?»
Esto lo dijo, no porque le importasen los pobres, sino porque era un ladrón; y como tenía la bolsa llevaba lo que iban echando.
Jesús dijo: «Déjala; lo tenía guardado para el día de mi sepultura; porque a los pobres los tenéis siempre con vosotros, pero a mí no siempre me tenéis.»
Una muchedumbre de judíos se enteró de que estaba allí y fueron, no sólo por Jesús, sino también para ver a Lázaro, al que había resucitado de entre los muertos. Los sumos sacerdotes decidieron matar también a Lázaro, porque muchos judíos, por su causa, se les iban y creían en Jesús.

Comentario

En el evangelio de hoy, Jesús busca refugio en la casa de sus amigos, seis días antes de la Pascua o sea faltando muy poco para los momentos difíciles que él sabía se iban a venir.

Allí se nos muestran dos maneras de obrar bien contrapuestas, por un lado la actitud de María generosa, servicial, hospitalaria,  amorosa, brindándole a Jesús lo mejor que tiene, lo más valioso. Por otro lado Judas egoísta, interesado, ladrón, queriendo sacar provecho para sí mismo, siendo además deshonesto y mentiroso.

Es como esos cuentos de cuando éramos niños y los personajes se nos presentaban tan bien diferenciados en el “bueno” y el “malo” y nos era fácil elegir con quien queríamos alinearnos.

Pero ya no somos niños y sabemos que no todo es blanco o negro, todos tenemos un poco de María y todos tenemos también un poco de Judas, todos poseemos cosas valiosas, talentos, virtudes que se nos han dado y que a veces las brindamos generosamente, desinteresadamente y otras en forma egoísta las guardamos y nos cuesta desprendernos pensando “a esto le puedo sacar provecho para mí”.

Esperemos que en esta Pascua podamos ser más María y menos Judas y brindar generosamente esos valores que poseemos y ofrecerlos a Jesús que como anuncia en el evangelio no va a estar con nosotros físicamente pero sí se quedará en los más desposeídos. Brindémonos con generosidad, acogiendo a los hermanos con lo mejor que tenemos y no guardándolo para nosotros mismos.

Familia Miraballes
Comunidad Educativa JM- Cardona (Uruguay)

Cuaresma, Sin categoría

24 de marzo. 5ª semana de Cuaresma

Números 21,4-9/

Sal 101,2-3.16-18.19-21

R/. Señor, escucha mi oración, que mi grito llegue hasta ti/

Juan 8,21-30

Jesús les dijo también: «Yo me voy, y ustedes me buscarán y morirán en su pecado. Adonde yo voy, ustedes no pueden ir». Los judíos se preguntaban: «¿Pensará matarse para decir: «Adonde yo voy, ustedes no pueden ir»? Jesús continuó: «Ustedes son de aquí abajo, yo soy de lo alto. Ustedes son de este mundo, yo no soy de este mundo. Por eso les he dicho: «Ustedes morirán en sus pecados». Porque si no creen que Yo Soy, morirán en sus pecados». Los judíos le preguntaron: «¿Quién eres tú?». Jesús les respondió: «Esto es precisamente lo que les estoy diciendo desde el comienzo. De ustedes, tengo mucho que decir, mucho que juzgar. Pero aquel que me envió es veraz, y lo que aprendí de él es lo que digo al mundo». Ellos no comprendieron que Jesús se refería al Padre. Después les dijo: «Cuando ustedes hayan levantado en alto al Hijo del hombre, entonces sabrán que Yo Soy y que no hago nada por mí mismo, sino que digo lo que el Padre me enseñó. El que me envió está conmigo y no me ha dejado solo, porque yo hago siempre lo que le agrada». Mientras hablaba así, muchos creyeron en él.

Comentario

Jesús nuevamente hoy como tantas otras veces nos invita a creer, a creerle. Y creer en el implica creer que lo que dice y lo que hace viene del Padre. Ese padre del que nos fue hablando mucho antes de que anunciara su muerte.

Muchas veces lo hemos escuchado decir esta frase acompañada de ciertas características, “yo soy el pan de vida”, “yo soy la luz del mundo”, “yo soy el agua viva”. Hoy nos lo dice claramente “YO SOY”, sin vueltas, sin agregados, y el Padre es quien me envía.

En este pasaje del evangelio Jesús nos quiere transmitir que Él muere por nosotros y que solo creyendo en El, en que “Él Es” quien nos salva, podremos salvarnos.

Sofía Wilde
Comunidad Educativa JM- Cardona (Uruguay)